9/21/2008

Windows


Ventanas.
Reflejos de mundos traslúcidos.
Marcos de ventanas que recuerdan puertas.
Puertas con vidrios que reflejan mundos.
Mundos interiores que reflejan vidas.

El reflejo es una ventana hacia otros reflejos.
El contenido de la ventana es un reflejo.

¿Quién vive adentro?
¿Quién se refleja afuera?

Una lámina de vidrio separa dos mundos paralelos, convergentes o disímiles.

Ventanas, marcos, vitrinas, reflejos de vida.


Una colección de ventanas, espejos y reflejos, vistos desde diferentes ángulos, casi siempre desde afuera, a veces con la ayuda de un filtro polarizador que nos revela ambos lados de los espejos que nos rodean y que no siempre vemos.

¿Quién se refleja adentro?

























































vea una presentación fotográfica de ventanas en:


7/24/2008

La tragedia naval de Rimouski

Luego de recorrer más de 1300 km por carretera desde Burlington, Ontario, se llega al puerto de Rimouski, ciudad fundada en 1656 por René Lepage, Señor de Santa Clara.


La edificación más alta de Rimouski, en la provincia de Quebec, es su Catedral.


Maison La Montagne, construida ca. 1750 por algunos de los primeros colonos franceses de Rimouski.


Rimouski se encuentra sobre la ribera sur del rio que en la lengua iroquesa de los indios mohawk (no confundir con mohicanos, tribu imaginaria inventada por el escritor norteamericano James Fenimore Cooper en su novela sobre el último de esa congregación) era llamado Kakanoaakakagaalla. El río, que hoy lleva el nombre de San Lorenzo, fue explorado por Jacques Cartier, quien lo bautizó Río del Canadá. Nace en el lago Ontario y desemboca en el estuario más grande del mundo.


Estatua de Thayendanegea en Ottawa. El líder mohawk, que se alió con los ingleses contra los estadounidenses, es mejor conocido por su nombre occidental, Joseph Brant.

La poca profundidad de las zonas de marisma localizadas a lado y lado del cauce principal del río San Lorenzo, y sus fuertes corrientes, asociadas a las mareas, hicieron que su navegación fuera muy difícil. Era necesario contar con los servicios de un piloto para el recorrido entre el puerto de Quebec y Rimouski. En el faro de Pointe-au-Pére se recogía o se dejaba al experto que ayudaría a dirigir las maniobras de navegación por este sector, corredor fluvial de gran importancia para los viajes hasta Gran Bretaña.


Faro de Pointe-au-pére.

El 28 de mayo de 1914, partió de la ciudad de Quebec el RMS Emperatriz de Irlanda, rumbo a Liverpool. La mascota del barco, una gata llamada Emmy, no quiso ir en ese viaje, y escapó en más de una oportunidad. Quizá su instinto animal la hizo preferir quedarse en tierra mientras veía partir su nave desde el puerto de Quebec.


Puerto de Quebec.

En esa oportunidad, el capitán sería Henry George Kendall, quien haría su primer viaje por el río San Lorenzo como comandante del navío. En la madrugada del 29 de mayo, cuando se acercaba a Pointe-au-Pére en Rimouski, en medio de la neblina y en la que fuera considerada como una conducción negligente, el carguero de carbón Storstrad arremetió contra la Emperatriz de Irlanda por estribor. En tan sólo 14 minutos, el barco se hundió, dejando un saldo de 1012 muertos, en el que es considerado como el peor desastre marítimo de Canadá, segundo en número de víctimas después del hundimiento del Titanic.




Faro de Pointe-au-pére, Rimouski, Quebec, Canadá (48°26’N 68° 31’W), a unos 5000 km de distancia lineal de Bogotá, Colombia (4°38’ N, 74° 05’W).

7/15/2008

El fuego, el juego





Cuando Prometeo robó el fuego a Zeus para entregárselo a los mortales, quizá no imaginó el castigo al que sería sometido por su osadía: eternamente encadenado a una roca, a merced de un águila que diariamente devoraría parte de su hígado, órgano que tiene la capacidad de regenerarse, proporcionando alimento perpetuo para el ave rapaz.



Entretanto, el fuego ha iluminado caminos de progreso y ha alimentado hogueras de destrucción y muerte para la humanidad.
Mientras espera el rutinario y voraz regreso de su visitante, Prometeo podría preguntarse si valió la pena el esfuerzo.




Entretanto, los humanos se recrean en la belleza del fuego, convertido en espectáculo pirotécnico…


4/07/2008

Lluvia de Violines




En el marco del Festival de Teatro de Bogotá, un espectáculo callejero que combina música moderna, percusión y un cuarteto de cuerdas que "flota" sobre los testigos atónitos, gracias a la monumental grúa de la que cuelgan los músicos, desde unas figuras móviles que recuerdan a Calder y evocan los instrumentos de cuerda.





Pluie Violons, de la compañía francesa Transe Express, dirigida por Gilles Rhode, un verdadero deleite visual en una despejada y fría noche en la Plaza de Bolívar.